Es la certeza
de contar en el reloj
la hora del fin del espacio.
Es el encuentro,
esperar el hogar del fin del tiempo,
(la eternidad) en tus labios.
Es cerrar los ojos,
en la más oscura soledad,
para verte.
Tu calor, tu sonrisa, tu voz y tus brazos,
lo que siento en el frío más lejano.
Sentir (siempre saberte)
en mi inacabado vacío,
tu corazón.